Como os comenté en otra entrada, a mi hija le gusta escribircuentos. Ya tiene 5 años y casi sabe escribir, por lo que hace casi todo ella,
con ayuda, claro.
Voy empezar una serie
de entradas donde explicaré algunas formas de hacer cuentos con nuestros peques,
para que nuestros hijos sean pequeños escritores:
Cuento de imágenes.
Aquí dependerá de nuestra destreza para
pintar (nula en mi caso).
- Si sabemos pintar, haremos dibujos relacionados, con un paisaje y varios personajes (haremos 2 o 3 dibujos para los más pequeños y cada vez más dibujos cuando vayan creciendo).
- Si no sabemos, podemos buscar imágenes por internet (y aprovechar para que las pinten o ya pintadas).
Le diremos al niño que nos cuente el cuento que está viendo
y, según la edad, lo iremos escribiendo, lo escribirán con nuestra ayuda o lo
escribirán solos.
Podemos basarnos en cuentos clásicos (Caperucita Roja, Los
Tres Cerditos… de los que encontraremos bastantes imágenes por internet) o
hacer uno propio, buscando o dibujando imágenes que tengan algo que ver y dejar
al niño que imagine la historia.
A mí me gusta más la segunda opción, salen
cuentos más divertidos.
Cuento con fotos.
Esto no lo he probado, pero tengo que
hacerlo. Puede hacerse de dos formas.
- Hacer un cuento a partir de fotos. Coge unas fotos que tengas por casa de tus peques (que estén riendo, llorando, en un parque, con un animal…) y diles que las ordenen y que inventen un cuento con lo que ven. Seguro que sale un cuento muy divertido y a los niños les encantará porque ellos son los protagonistas.
- Hacer fotos a partir de un cuento. Inventar un cuento que tiene que tener unas características determinadas: Los personajes tienen que ser gente conocida (y que se deje hacer fotos) y tiene que ocurrir en lugares a los que nos sea fácil ir con la gente que salga (lo mejor es que sean los papás, los hermanos, algún tío o abuelo y en casa de los abuelos, el parque…). Una vez inventado el cuento iremos a los sitios e interpretaremos el cuento en imágenes (ahora con las cámaras digitales es muy fácil ya que podemos repetir las fotos hasta que salga como queremos)
- Otra variedad sería inventar un cuento y representarlo y grabarlo para ponerlo a modo de película. O representarlo a modo de teatro en alguna celebración familiar. Seguro que es muy divertido.
Animaros a hacer estos juegos con los niños. No les forcéis,
podéis hacer un cuento en una semana, con una hoja cada día, o un día
escribirlo y otro pintarlo.
No los agobiéis o será peor, le cogerán manía a la
escritura, a los cuentos, a leer… y eso es lo último que queremos, verdad?
Seguir el ritmo que marquen vuestros peques, al fin al cabo
consiste en que se diviertan, lo de aprender viene sólo.
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