Mi hija pequeña está en una etapa irrepetible y maravillosa.
La mayor pasó también por esa etapa.
La mayor pasó también por esa etapa.
Ahora está en una etapa no tan graciosa e impactante a la vista, pero tan importante o más que la de la pequeña.
Cada vez se forma más como individuo independiente, está formando las bases de lo que será su personalidad. Aprende a razonar, debatir, es impresionante lo mayor que está.
Y a qué viene esta obviedad? Esta reflexión?
Pues a que me he dado cuenta que siempre hablamos de la peque, hacemos referencia a sus locuras (está claro que es gracioso), pero puede hacer parecer que desplazamos a la mayor y que no la tenemos tan en cuenta.
El otro día fue ella misma la que me lo hizo ver.
Como la peque llora todos los días en la fila, empezamos a decirle que si no lloraba, le llevaríamos una sorpresa (no se si es la mejor manera, me temo que no,pero en ese momento nos pareció una buena idea).
Como seguía llorando, la sorpresa no llegó.
Y la mayor un día nos dice:
- "Mamá, yo siempre me porto bien en la fila y no me dais ninguna sorpresa"
Se me calló el mundo a los pies. Me sentí super culpable y mala madre.
Retrocedí a mi niñez, cuando pasaba por algo similar, y no me gustó nada.
Cuando yo era pequeña era muy buena niña (aunque suene mal decirlo sobre mi misma). Sacaba buenas notas, me portaba muy bien, estudiaba, hacía los deberes.
Pero era mi hermano el que recibía más premios y halagos por sus resultados.
No me malinterpretéis, siempre me he sentido querida y he visto a mis padres orgullosos de mis notas y comportamientos, pero como era "lo normal", no se le daba tanta importancia.
Así que, tras esta reflexión, me dije a mi misma que tenía que mostrarle más a menudo a mi hija mayor lo orgullosa que estoy de ella, lo feliz que me hace verla crecer.
Y en eso estamos ahora mismo, tratando de hacerle ver lo que la valoramos, lo que la queremos y lo importante que es para nosotros.
Lo que no quiere decir que estemos desplazando a la peque, faltaría más, ni que estemos obviando las cosas que no hace tan bien, ya que sería un poco ir al revés.
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